CÓMO HACER UN BUEN CAFÉ CON LA CAFETERA PRENSA FRANCESA
Está en muchas casas, aunque a menudo se usa más como tetera o para preparar infusiones de hierbas. Lo cierto es que la prensa francesa es un tipo de cafetera de émbolo o de pistón con el que se puede obtener una excelente taza de café de forma fácil y rápida.
El origen de la cafetera prensa francesa se disputa entre franceses e italianos. Lo cierto es que en 1850 ya se usaba en las cocinas francesas una primera versión de la cafetera de émbolo. Esta primera versión de la prensa francesa tenía algunos defectos, ya que el café se escapaba por los lados y la infusión resultante no era limpia.
En 1929 el italiano Attilio Calimari patentó la primera cafetera de prensa francesa con un muelle flexible alrededor del filtro; una cafetera muy parecida a la actual y que se fue perfeccionando con diseños de Bruno Cassol y del suizo Faliero Bondanini. Este último popularizó la cafetera en Francia primero y en el resto de Europa después. La cafetera de émbolo que conocemos actualmente consta de tres partes: una jarra, un émbolo que se ajusta a los bordes y una tapa.
El sistema de prensa francesa para café tiene numerosas ventajas. Se puede preparar una gran cantidad de café con rapidez, no necesita electricidad, se limpia fácilmente y no necesita mantenimiento. Es ideal para obtener un buen café, intenso y sabroso, sin complicarse la vida.
El café preparado con prensa francesa tiene mucho cuerpo y es más denso, ya que retiene más aceites del café que otras cafeteras. El sistema de filtro de la prensa francesa también es responsable de una textura un poco más arenosa de la infusión.
Usar la prensa francesa para hacer café es fácil, pero hay que tener en cuenta algunos detalles previos para que el resultado sea perfecto:
Usar café tostado en grano y molerlo en el momento. Las cafeteras de émbolo precisan de un café molido grueso. Como no siempre podemos controlar el grado de molienda en los cafés ya preparados, lo mejor es hacerse con un molinillo y un paquete de café en grano Bonka. Para saber si la molienda es adecuada, podemos coger un pellizco de café con los dedos, si se desprende bien y no deja mancha es correcto. Si queda alguna mancha es que es demasiado fino.
El tipo de molienda no es un capricho. Las cafeteras de prensa francesa funcionan con el mismo método de infusión que el té. El agua debe tener superficie de contacto con el café para extraer todo los aromas y sabores. Si es muy fino no hay casi superficie de contacto y solo obtenemos sabores amargos y desagradables.
Precalentar la jarra es fundamental para que no pierda temperatura demasiado rápido. Para ello, lo más fácil es llenarla de agua caliente y después vaciarla. Estará lista.
El agua es tan importante como el café. Es mejor usar agua mineral o filtrada y debemos calentarla hasta los 92 o 93 ºC. Para no estar pendientes con el termómetro, un buen método es hervir agua y dejarla reposar entre 15 y 30 segundos antes de añadirla al café.
¿Qué dosis de café hay que usar en esta cafetera? Depende del gusto de cada uno, pero por norma general se usa proporción de 1 gramo de café por 15 mililitros de agua. Si lo traducimos en tazas, para preparar 2 tazas de café hacen falta 210 mililitros de agua y 14 gramos de café. Por supuesto, este ratio puede variar para obtener un café más o menos intenso.
Cómo preparar café en prensa francesa
Una vez tenemos todo listo, preparar el café en este tipo de cafeteras es muy fácil.
- Ponemos el café molido en la jarra
- Añadimos el agua caliente poco a poco
- Removemos bien
- Ponemos la tapa (sin presionar el émbolo) y dejamos infusionar el café entre 3 y 5 minutos.
- Presionamos el émbolo lentamente y con cuidado para separar el café molido de la infusión.
- Servimos en el momento.
El tiempo de infusión es aproximado y hay que tener en cuenta el tipo de café. Por ejemplo, para un café de tostado ligero necesitamos 5 minutos como mínimo para extraer los aromas y sabores. En cambio, para un café de tostado oscuro, con 3 minutos es más que suficiente si no queremos un café demasiado amargo.
Finalmente, a la hora de preparar café en prensa francesa hay que tener en cuenta que debe servirse inmediatamente. Si sobra café, es mejor pasarlo a un termo u otro recipiente para que no siga en contacto con los posos. Si lo dejamos más tiempo en la cafetera, se volverá demasiado amargo.