Café responsable, el café del futuro
La crisis climática está afectando a una parte importante de las plantaciones repartidas por todo el planeta. Las temperaturas extremas, la sequía y las lluvias irregulares influyen directamente en la cantidad de la producción y en la calidad. El cultivo de café responsable se presenta como la única alternativa posible para mantener la producción, así como la seguridad económica y alimentaria de los agricultores.
Respeto a los recursos naturales
La palabra responsable está cada vez más presente en nuestras vidas, y también en el mundo del café. Un cultivo responsable es aquel que respeta los recursos naturales de la zona, contribuyendo a la conservación de la flora y la fauna y ayudando al desarrollo de las zonas rurales donde se cultiva.
La mayoría de las zonas en las que se encuentran las plantaciones de café son zonas de gran biodiversidad y es muy importante mantener su preservación. La agricultura de cultivo responsable, además de hacer un uso racional de los recursos, evita al máximo el uso de herbicidas y pesticidas, y utiliza técnicas de cultivo respetuosas con el medio. Una de las técnicas de cultivo del café que salvaguardan el entorno y garantizan una producción de calidad es el cultivo a la sombra.
Cultivo a la sombra: una técnica ancestral y responsable
Los pequeños agricultores de las comunidades productoras de café llevan años aplicando técnicas de cultivo tradicionales con el fin de mantener unos estándares de cantidad y de calidad de las producciones. Ellos lo saben todo sobre el cultivo del café y en gran parte de las plantaciones tradicionales se aplica el cultivo a la sombra.
Hay dos formas de cultivar café: al sol y a la sombra. Los cultivos al sol, propios de las grandes producciones, provocan la deforestación de grandes extensiones de terreno, destruyen los bosques y los hábitats de flora y fauna y disminuyen la biodiversidad. Además provocan pérdidas de suelo fértil por el arrastre del suelo por las lluvias y también la contaminación de suelos, aire y agua por el uso de pesticidas y abonos industriales de origen químico.
El cultivo a la sombra es una técnica tradicional que contribuye a preservar recursos naturales. La mayoría de los cultivos se hacen debajo de árboles de sombra, de más de cinco especies diferentes. Y así se convierte a los cafetales en excelentes fábricas de oxígeno y agua.
El cultivo a la sombra del café ayuda a cuidar los recursos naturales y también contribuye a que los cafetales sean fincas responsables y compatibles con la producción de otros alimentos, especialmente frutales.
Los manantiales: en el punto de mira de la preservación de los recursos naturales
El agua es un recurso vital en el proceso de producción del café, desde el cultivo y la cosecha hasta el procesamiento y la preparación y, por tanto, su protección reside entre los primeros objetivos en la preservación de los recursos naturales.
Un elevado consumo de agua asociado a la producción de café puede tener consecuencias ambientales significativas. Entre los factores relacionados con el agua destacan la posible escasez, la contaminación a causa del uso de productos químicos o por aguas residuales y la degradación del hábitat a causa del estrés hídrico.
Por lo tanto, la protección de los manantiales se enmarca dentro de las principales acciones para conservar los recursos naturales. La protección medioambiental del entorno y el crecimiento de los niveles de agua disponibles son claves para preservar el hábitat y proteger la vida en él.
La contribución de los cafetales a la fertilidad de los suelos
La plantación de cafetos también se puede considerar dentro de las medidas para proteger los recursos naturales.
Gracias a los cafetales se evita la erosión al proteger los suelos. Los árboles y plantas de café funcionan como un manto que evita que la lluvia y el viento erosionen el suelo. Al evitar la erosión se mantiene la fertilidad de los suelos, mejora el desarrollo de las plantaciones y se contribuye a la conservación de los ecosistemas.
Algunos cultivos agrícolas destruyen zonas de bosque y provocan efectos dañinos en el medio ambiente. Las plantaciones de café a la sombra, por el contrario, no sustituyen los bosques ni promueven su tala sino que se adaptan a ellos y conviven, de ahí la importancia de cuidar los recursos naturales en las plantaciones.
Café ecológico: un paso más hacia la responsabilidad
Responsable y ecológico no significa siempre lo mismo. El café ecológico es un paso más hacia la responsabilidad y la preservación de recursos naturales.
El café ecológico es un tipo de café de cultivo responsable que ha de cumplir expresamente algunas de las condiciones a las que nos hemos referido anteriormente: no se usan pesticidas ni fertilizantes químicos, se trata de cultivos de café a la sombra, y tanto el cultivo como el procesado de los granos es muy selectivo y muchas veces se realiza de forma manual.
El café ecológico se distingue fácilmente del resto porque cuenta con un sello identificativo en el envase.
Otras ideas para cuidar los recursos naturales
Entre las diferentes medidas e ideas para cuidar los recursos naturales en el cultivo del café se encuentra una actividad puesta en marcha por Nestlé en la zona rural de Espirito Santo, en Brasil, en la que se utilizan las abejas como agente polinizador de las plantaciones de cafetos.
Las abejas juegan un papel clave para la polinización de los cafetales ya que proporcionan bienestar al cultivo y beneficios económicos para el productor, como un aumento del rendimiento y una mejor calidad de los granos de café.
En definitiva, contribuyen a la preservación de ecosistemas al proteger a las abejas y, al mismo tiempo, mejoran la calidad de vida de los productores al garantizarles una mayor producción y de mayor calidad.
Café de cultivo responsable, café de mejor calidad
Son diversas las medidas que se pueden aplicar para reducir la huella ambiental en el cultivo del café. La mayoría de ellas, además, inciden en la calidad final del café. Así, el café de cultivo responsable suele ser un café también de mayor calidad.
Desde Bonka somos muy conscientes de la importancia de la conservación del medio y estamos comprometidos en preservar los recursos naturales disponibles y contribuir a la conservación de los ecosistemas sin perjudicar la flora y la fauna.
Por eso desde 2010 disponemos de café Bonka de cultivo responsable, producido bajo árboles de sombra de más de 5 especies distintas, favoreciendo la creación de hábitats para infinidad de animales y vegetales.
En 2019 ampliamos nuestra gama con una nueva variedad ecológica y certificando con Rainforest Alliance nuestras variedades de café Premium. Así garantizamos la conservación de la biodiversidad, el desarrollo de las comunidades, los derechos de los cafetaleros y las prácticas agrícolas productivas.
Todo ello unido a medidas de responsabilidad energética, como el uso de energía procedente de fuentes renovables en nuestros tostaderos de café, o la reducción del plástico en los envases.
Porque el único café con futuro es el café responsable.