10 usos del residuo del café que te sorprenderán
Una mañana cualquiera. Nos levantamos, ponemos agua en la cafetera, un poco de café molido en el cacillo y nos preparamos una reconfortante taza de café. Recogemos, limpiamos la cafetera, vaciamos el cacillo… ¿Donde? Por lo general, y sin casi pensar, el residuo del café acaba en la bolsa de orgánico. ¿Es la única solución? No. El residuo de café molido puede servir para mucho más que esto.
Solo en España se tiran más de 150 millones de kilos al año de desechos del café a la basura. Recuperar parte de estos residuos es un gesto ecológico y, además, nos ayuda a mejorar algunos aspectos de nuestra vida cotidiana.
En muchos casos, será necesario secar esta broza de café antes de usarla. Para ello es suficiente con esparcirla en una superficie lisa y dejarla durante 24 horas, removiendo de vez en cuando. Una vez seca, se puede guardar en un bote de cristal bien cerrado y usarlo para todo esto:
1. Fertilizante para las plantas
Una opción muy popular es reutilizar los residuos de café como abono para las plantas. Es suficiente con añadir un poco de broza de café a la tierra de las plantas una vez al mes, sea directamente o bien mezclado con parte del agua de regar. Este gesto mejora el drenaje y la ventilación de la tierra y ayuda a retener el agua. No solo eso, el residuo del café es bueno para las plantas porque contiene nitrógeno y fósforo, nutrientes que las plantas necesitan.
2. Atrapa los malos olores en armarios, basura y neveras
Los malos olores dejarán de ser un problema gracias a la broza del café. Un poco de residuo seco de café en un recipiente hondo destapado ayuda a retener aromas indeseables en armarios o en la nevera. Además, si pones un poco de residuo de café en el fondo del cubo de la basura, debajo de la bolsa, también actuará contra los olores. Eso sí, hay que ir cambiando estos posos de vez en cuando ya que pierden eficacia con el tiempo.
3. Elimina el olor de ajo, cebolla o pescado de las manos
Al cocinar, si no usamos guantes, algunos aromas quedan impregnados en la piel de las manos. A menudo, lavarse las manos con agua y jabón no es suficiente. En estos casos el residuo de café es útil. Es suficiente con frotar las manos con broza de café y enjuagar bien después, el olor desaparece.
4. Limpiar sartenes y bandejas de cocina
Los desechos del café son ligeramente abrasivos. Por eso, son especialmente útiles para limpiar restos pegados en sartenes, bandejas y otros utensilios de cocina. Un poco de café molido y un estropajo es suficiente para dejar todo el menaje de cocina limpio y reluciente.
5. Ahuyenta hormigas y otros insectos
Los residuos del café tienen usos muy diversos. No solo sirven para las plantas y para usos domésticos, también ayudan a combatir algunas plagas de insectos. Hormigas, caracoles, aunque también los gatos, no soportan el aroma a café. Así pues, un saquito con restos secos de café en puntos estratégicos ayuda a mantener las hormigas fuera de casa y evita tener que utilizar insecticidas.
6. Consigue una piel más suave
Otro motivo para no tirarlos, usar los residuos de café para la piel. Puedes preparar un magnífico exfoliante casero y 100% natural con posos de café. Una opción es usarlos directamente sobre la piel mojada realizando movimientos circulares o bien mezclarlos con el gel de ducha o con aceite para aplicarlos.
Este mismo exfoliante de café, mezclado con aceite de coco, es un magnífico anticelulítico.
Los nutrientes y antioxidantes del café, que permanecen en los posos, ayudan a combatir la grasa que se acumula debajo de la piel. Es un remedio natural, fácil y muy económico.
7. Consigue un cabello brillante
Los residuos del café son fantásticos para dar un brillo espectacular al cabello negro o castaño. Para ello, prepara una infusión con agua caliente y los posos de café. Después cuela y deja enfriar. Una vez fría, aplica este café en el pelo después del lavado y enjuaga bien. El pelo estará más brillante, fuerte y vigoroso, y si tienes algunas canas, se atenúan.
Hay que tener en cuenta que el café puede teñir, por eso solo es aconsejable en caso de cabello moreno o castaño oscuro.
8. Repara arañazos en los muebles
Los usos del residuo de café llegan también a la carpintería. En el caso de muebles de madera oscura que tengan arañazos, se pueden disimular con café. Usa un bastoncillo de algodón humedecido y aplica los posos en los arañazos. Deja actuar unos diez minutos y limpia con un trapo de algodón. Fácil y rápido.
9. Tinte y pintura natural
Con los posos del café podemos teñir ropa, dar color a muebles rústicos o incluso pintar. Prepara una pasta con los residuos de café y un poco de agua tibia. Después aplica donde sea necesario, bien con un trapo o con un pincel si queremos pintar. El resultado siempre será un marrón oscuro, pero podemos conseguir efectos artísticos asombrosos con un poco de café usado.
10. Velas con aroma a café
¿Te imaginas tener ese rico aroma de café siempre que quieras en tu casa? Puedes conseguirlo con velas caseras de café. Mezcla parafina líquida con residuo de café y llena unos moldes con una mecha en medio. Como moldes puedes aprovechar tarros limpios o incluso tetrabricks. Anímate a darle un efecto estético, como poner parafina y café por capas, ¡deja volar la imaginación! El resultado son velas muy decorativas y con gran fragancia.
Los residuos del café son mucho más que esto, residuos. Usarlos de nuevo ayuda, no solo a mantener una casa más limpia y a cuidarnos, también a bajar la cantidad de desechos que echamos a la basura. Reducir, reciclar y reutilizar, las 3R de la ecología se aplican a la perfección en el caso del residuo de café.